Hades ha venido a visitarnos porqué, mientras su propietaria cosía, ha robado un alfiler y creen que se lo ha podido tragar. Su propietaria no ha querido esperar ni un segundo y a nos ha traído a Hades diciéndonos que no hará más de media hora que se lo ha podido tragar.
¿ Qué riesgos comporta tragarse un alfiler?
Como es lógico pensar, un alfiler dentro del cuerpo no es nada bueno.
Una vez en la boca le alfiler puede pasar hacia el estómago o puede clavarse en la zona de la faringe, boca, esófago…
Si se clava a un tejido puede perforarlo y salir a cavidades y llegar a clavarse a pulmón, corazón, hígado o otros órganos y traer graves consecuencias.
Por eso es muy importante identificar si realmente hay un alfiler y, en caso de haberlo, extraerlo del cuerpo lo más rápido posible.
¿ Qué hacemos con Hades?
El primer paso es hacer radiografías para ver si realmente hay o no hay alfiler.
Un alfiler es un objeto metálico por lo que se podrá visualizar muy bien en una radiografía.
Pero, ¿ de qué zona hacemos la radiografía?
Como hace muy poco que se lo ha tragado hemos de hacer placas de la zona del cuello, tórax y estómago, que es el recorrido que ha podido hacer el alfiler.
En la siguiente placa podéis ver como, efectivamente, Hades se ha tragado el alfiler y parece ser que este se localiza en su estómago.
¿ Qué hemos hecho con Hades?
Irremediablemente Hades ha tenido que pasar por quirófano.
Hemos tenido que realizar una laparotomía exploratoria para extraer el alfiler del estómago pero nuestra sorpresa ha estado cuando no lo hemos encontrado en el estómago.
Como no palpábamos el alfiler dentro del estómago hemos seguido el recorrido de los intestinos y hemos encontrado el alfiler en duodeno, clavado en el intestino.
Ahora Hades deberá estar en ayunas 24h y 12h sin beber para evitar que la sutura de intestino pueda abrirse. También deberá tomar antibióticos preventivos y, esperemos, que en una semanita este recuperado.
Iris Pérez.